¿Qué es un equipo de contar cartas de blackjack?
La técnica de contar cartas siempre ha sido una gran pesadilla para los casinos. Básicamente no es una técnica del todo ilegal a no ser que se utilizan máquinas u otras herramientas para hacer el conteo más fácil.
En realidad los jugadores hábiles que pueden utilizar el conteo son muy pocos porque esta técnica requiere excelentes habilidades matemáticas y una concentración de máximo nivel. Además, en la actualidad los casinos utilizan distintas formas de procedimiento que impiden hacer un conteo de cartas y si sospechan que alguien cuenta las cartas lo expulsarán de inmediato del salón de blackjack.
Si tú también eres aficionado al blackjack y te gustaría aprender esa técnica de expertos del juego puedes leer nuestro post en este blog dedicado al tema del conteo de cartas. Si eres un principiante que quiere aprender como jugar al blackjack te podemos ayudar en encontrar el juego que mejor se adapte a ti porque te proporcionamos muchas reseñas de blackjack con todas las reglas de cada variante que está disponible en el mercado español.
Los miembros del equipo del MIT tampoco conocían el juego al inicio y gracias a sus habilidades matemáticas se convirtieron en expertos y en unos de los contadores de cartas m’as famosos del mundo. En aquella época en los casinos no contaban con las mismas herramientas tecnológicas de hoy para detectar rápidamente a los contadores de cartas. La gran diferencia estaba en el hecho de que los que ganaban dinero contando cartas lo perdían con la misma facilidad haciendo grandes apuestas.
Las cosas cambiaron a mediados de los setenta del siglo 20, cuando un tipo llamado Ken Uston consiguió consolidar su actividad liderando grupos bien organizados para vencer a los casinos en todo el mundo. Resulta que estos ‘científicos del blackjack’ no se quedaron en el mismo nivel durante todo el tiempo y desarrollaron nuevas estrategias. Uston incluso publicó un libro en el cual describió su gran éxito mostrando el conteo de cartas a la vista de todos como la técnica perfecta para el juego de blackjack.
“El conteo lo es todo.”Bill Kaplan
Para poder hacer el conteo de cartas se necesitan varias personas por unas razones sencillas. El crupier baraja muchas cartas y de manera rápida, también puede emplear una máquina automática de barajar, y por tanto se necesita una persona del equipo que sea ‘el observador’ de las cartas y que haga el conteo. Por eso el observador solo apuesta pequeñas cantidades de dinero para poder realizar la observación de la mesa.
Por otra parte, una persona del equipo debe ser ‘el gran jugador’ quien va a apostar en el momento adecuado. El objetivo del equipo es de determinar el momento en el que las cartas son beneficiosas y se debe apostar a lo grande. Este momento se indica por el observador al gran jugador para que este otro haga mayor apuesta que puede ser incluso una suma escandalosa. Esta división de roles entre los miembros del grupo se utiliza también en otra técnica llamada clasificación de bordes.
Para obtener máximas ganancias los equipos de blackjack utilizan también ‘inversores’. Estas personas son las que proporcionan el dinero para las apuestas. No obstante los inversores nunca son realmente gente desconocida para los miembros del equipo y en la mayoría de los casos son sus familiares o amigos.
Visto así no hay nada complicado en este esquema. Cuando la idea apareció por primera vez hubo mucha gente joven e inteligente que quiso ganar dinero a costa de los casinos. Es muy probable que algunos de ellos tuvieran éxito sin presumir ni contar sus historias a nadie más, mientras que otros fracasaron y tiraron la toalla. Sin embargo, los chicos del MIT eran muy diferentes.
El juego para ellos se convirtió en un negocio serio.
Empezar desde el cero y llegar hasta la cima
“Cómo apostar cuando debes hacerlo.” Este no es el nombre de un curso online más y ni mucho menos para unos estudiantes del Instituto Tecnológico de Massachusetts. No obstante, todo empezó allí en el MIT, donde los primeros miembros del equipo se reunieron para crear este mítico grupo de jugadores de blackjack. Fue en el lejano 1979 cuando empezaron su aventura en los casinos. Sus primeros pasos no resultaron exitosos y muchos miembros quedaron desilusionados por las pequeñas cantidades ganadas por lo que dejaron el equipo. Sin embargo, fue un encuentro del destino que lo cambiaría todo.
En aquella época el equipo del MIT estaba bajo el liderazgo de J.P. Massar conocido como ‘Sr. M’. Un día en mayo de 1980, mientras estaba comiendo en un restaurante, escuchó una conversación interesante sobre el conteo de cartas. Los que hablaban en la mesa cercana llamaron su atención al mencionar una devolución de 35 veces – ¡unos resultados que eran mucho mejores que los que tenían en su propio equipo del MIT!
Así se conocieron Sr. M. y Bill Kaplan que en ese momento estaba recién graduado de Harvard y había dirigido un exitoso equipo de contar cartas mientras estudiaba. El equipo de Kaplan estaba ya aburrido de los casinos en Nevada y quería hacer un giro por los casinos de todo el mundo. Al mismo tiempo Bill consideraba esta idea como demasiado complicada por tener que acostumbrarse a nuevos reglamentos de casino y no quería participar en los cambios de planes de su grupo. Justo por esa razón, la proposición de cooperación con Sr. M. le pareció más que interesante.
Las habilidades de negocio de Kaplan resultaron catalizadoras para los matemáticos del MIT que necesitaban justo esto. Antes de la llegada de Kaplan el equipo del MIT estaban enfocados demasiado en el uso de sistemas complejos y se pasaban más el tiempo en discusiones que en los juegos. Con la influencia de Kaplan el equipo del MIT mejoraron su sistema de conteo y aplicaron unos procedimientos internos más estrictos. Los jugadores empezarían a cobrar las horas pasadas en las mesas de blackjack y recibirían una parte de las ganancias. El nuevo equipo empezó con diez miembros y un bote común de $89,000 y consiguió duplicarlo en solo diez semanas.
Ya era hora de empezar el reclutamiento.
El equipo del MIT: una máquina de jugar bien estructurada
Pero no te creas que el equipo del MIT fueron un pequeño grupo de observadores que intentaron vencer al sistema. En la vida real ese tipo de hazañas raras veces funcionan. El famoso creador del sistema de conteo de cartas, Edward Thorp, también considerado como uno de los mayores tramposos de casino de todos los tiempos, había establecido las pautas para usar las habilidades y conocimientos para explotar el sistema en lugar de violar la ley.
El equipo del MIT era una verdadera empresa con fines operativos y un presupuesto establecido. Había una rotación constante de nuevos jugadores que entraban en el equipo solo después de pasar por un proceso de selección rigurosa que incluía muchas sesiones de conteo de cartas bajo condiciones extremadamente estresantes. Los novatos recibieron un entrenamiento extenso y completamente gratuito, que luego habitualmente convirtieron en grandes ganancias.
En aquel momento los casinos ya utilizaban reglamento interno que prohibía el conteo de cartas por lo que los observadores y los grandes apostadores del MIT no podían hablar del conteo corriente delante de todos. Utilizaban frases codificadas. Todos los miembros aprendieron a asociar palabras específicas con números con la ayuda de algunas cartas especiales. Si un observador usaba una de esas palabras en una frase esto significaba que daba una señal al apostador para que cambiase la apuesta.
‘Árbol’ porque se parece al dígito 1.
‘Interruptor’ y es 2 porque tiene dos opciones: encender/apagar.
‘Taburete’ es 3 por tener tres patas.
‘Coche’, porque tiene 4 ruedas
‘Guante’, porque los guantes tienen cinco dedos
‘Pistola’, porque una pistola contiene 6 balas
‘Craps’, because of the lucky 7 throw
‘Billar americano’ por la bola con el 8
‘Gato’, porque el gato tiene 9 vidas
‘Bowling’ porque hay 10 pines
‘Fútbol’, porque cada equipo tiene 11 jugadores
‘Huevos’ porque en general se venden en docenas
‘Bruja’ porque 13 es un número de mala suerte
‘Anillo’ porque está hecho de oro de 14 quilates
‘Cheque’ porque a la mayoría de la gente en los EE.UU. se les paga el día 15
‘Dulce’ por los Dulces 16 años
‘Revista’ por la Revista Americana llamada ’17’
‘Caja de votar’ porque solo puedes votar después de los 18 años
Las malas rachas eran algo natural para los jugadores individuales y para el grupo en general ya que el conteo de cartas no es un sistema perfecto. La visión a largo plazo y la completa fe en sus métodos mantuvieron a los jugadores seguir avanzando y el espíritu del equipo tuvo un gran papel. Muchas ideas de negocio exitoso fallaron debido a problemas de corto plazo, pero el equipo del MIT persistió y prosperó.
La disciplina fue la clave de su éxito. Lo que hacían ellos fue más que apostar: estaban invirtiendo su dinero y utilizaban tácticas que minimizaban los riesgos. Cada uno rellenaba informes detallados y la información del tiempo fue identificada como un recurso clave. El equipo estaba buscando siempre nuevos casinos que aun no estaban acostumbrados a detectar los contadores de cartas y hacía un seguimiento del personal de seguridad que ya conocía la técnica.
“Todos los ojos estaban puestos en el mismo objetivo. Cada jugador estaba tan preocupado por el rendimiento de sus compañeros como por el suyo.””Bill Kaplan
En algún momento se dice que el equipo del MIT consiguió obtener una ventaja de al menos 2% sobre la casa.
Por primera vez en la historia, la marea empezaba a cambiar.
Lo que llegó después: las muchas caras del equipo del MIT
En la década de los 80 el equipo del MIT creció rápidamente. En un momento dado había más de 30 jugadores rondando los casinos con un enorme capital de juego de más de $300,000. Durante los años buenos tenían un retorno de inversiones de hasta 300% lo que era un éxito sin precedentes.
Naturalmente los casinos empezaron a darse cuenta y algunos de los veteranos ya fueron marcados como peligrosos. Bill Kaplan por ejemplo tuvo que emplear un papel secundario y retirarse de la acción principal en las mesas, porque su cara ya era conocida en los casinos y una vez detectado, el personal de seguridad empezaba a buscar en seguida a los miembros de su equipo. No obstante, esto ya no fue un problema porque siempre había disponibles nuevos estudiantes del MIT.
Ya hacia el fin de los ochenta empezaron a sentir la fatiga cuando Kaplan junto con Sr. M. y el co-gerente John Chang decidieron aprovechar la apertura de nuevos casinos en Connecticut ¡e incluso crearon una empresa! En 1992 ellos registraron en Massachusetts la Sociedad limitada Strategic Investment. Estructurada como una agencia de bienes inmuebles, la empresa logró reunir un presupuesto de más de $1 millón y los contadores de cartas experimentados emplearon su mejor técnica. Con más de 80 jugadores en el equipo ellos atacaron a casinos en todo el continente norteamericano. Estaban ganando cantidades de récord y consiguieron alcanzar el pico de su éxito.
“Cuando tengas la ventaja, saca el dinero.”Bill Kaplan
El equipo de juego más exitoso de todos los tiempos encontró su inevitable fin en el cambio de los tiempos. Los casinos se sentían amenazados y empezaron a endurecer las medidas empleando a agencias de seguridad de elite para poner fin a los ataques sin precedentes. Los profesionales de seguridad empezaron a examinar los anuarios del MIT para poder detectar los jugadores potencialmente peligrosos.
No obstante, la era de la globalización que floreció durante los 90 ofreció nuevas formas potenciales más rentables para invertir. En el fondo los miembros del equipo del MIT eran empresarios. A finales de 1993 Strategic Investment Ltd fue disuelto por mutuo acuerdo y después de pagar ganancias sustanciales a jugadores e inversores por igual, los miembros principales siguieron con sus próximos proyectos.
Esto no fue el fin de la historia, por supuesto que no. Una gran cantidad de contadores de cartas entrenados formaron sus propios equipos y continuaron su gira por los casinos durante la década de los 90. Los anfibios y los reptiles fueron los brotes más famosos del equipo del MIT y con historias contradictorias sobre el tamaño real de sus operaciones. Hay suposiciones de que incluso los dos equipos competían para ver quién ganaría más dinero.
Todo esto continuaría hasta la llegada del nuevo siglo cuando las nuevas medidas de seguridad de los casinos lentamente ‘convencieron’ a los contadores de cartas profesionales para desviarse hacia otras actividades. Ya era hora para el equipo de blackjack del MIT de pasar a la historia.
Desvelar los secretos: el legado del equipo del MIT
En el día de hoy el equipo del MIT es muy bien conocido en todo el mundo. Sus aventuras fueron popularizadas en el libro de Ben Mezrich, “Bringing Down the House”, considerado como uno de los libros de juego indispensables para cualquier jugador de casino. También tenemos a la película “21” que no tuvo un éxito de taquilla, pero logró llamar la atención del público hacia los contadores de cartas más famosos. Muchos de los jugadores que lideraban al equipo durante los años se dieron a conocer públicamente y realizaron seminarios sobre las razones de su éxito.
En último lugar, la clave no era el sistema que usaban sino las características personales de los individuos que eran reunidos. Muchos de ellos se convirtieron en gerentes o consultores exitosos, desarrollándose en sus campos elegidos de la misma forma que lo hicieron jugando al blackjack.
No obstante, su paso devastador por los casinos de todo el mundo provocó un serio cambio en las regulaciones. Muchas de las reglas que te molestan hoy en día en los casinos online, donde dispones de infinitas opciones como jugar al Blackjack Lucky Lucky por dinero real, así como muchas de las restricciones en los físicos son el resultado de la presión realizada a los casinos por los equipos de blackjack organizados durante los años ochenta y noventa.
No importa si te gustan o no, los jugadores del MIT dejaron su huella en el mundo del juego para siempre y merecieron su sitio en la gran sala de la fama del blackjack. Y tú, si ahora te sientes inspirado para jugar este juego icónico puedes visitar alguno de los mejores casinos online en español donde puedes jugar por dinero real.
